A raiz de una entrada de seeducansolos que habla de otro tema que profundizaré más delante cuando lo estudie un poco más, me he quedado con algo que cuenta que me ha gustado mucho, que creo que tiene mucha razón y que me parece la base de la crianza: la flexibilidad. Es decir adaptarse, cambiar, probar, acertar, fallar...
Habla en esa entrada, en un momento concreto, sobre que ésta semana no actúa igual que la semana pasada y que tampoco hace las cosas como las hará la semana siguiente. Porque evolucionamos, porque cambiamos, porque os adaptamos a las circustancias, a nuestros hijos. Los niños cambian muy rápido, crecen a un ritmo que creo que no somos capaces de asimilar, por lo menos yo. Por esto me parece muy importante observar y aprender a ser flexible con nuestras ideas, nuestros planes, nuestras rutinas.
Me lo comentaba también Lily en la entrada de las ensaladas de hace un par de días y os lo copio aqui porque me ha gustado mucho lo que dice:
"El papel de madre es muy complidado SIEMPRE, con la comida, con los límites, con ... todo.
Piensa que ahora a mi niña, de 7 años, no le gusta unas cosas que antes le gustaban ...
Y lo positivo es que cada madre va aprendiendo sobre el camino y en base a las necesidades de su proprio hijo.
Y claro, las necesidades básicas cambian ... Por ésto estamos las madres: para conocer nuestro hijo y adeguarnos a su desarrollo y para crecer como madres y personas al lado de nuestros pequeños.
Por que cada niño es un mundo aparte, una persona diferente y si le conocemos de veras sólo podemos darle lo mejor."
Las personas siempre creen tener razón, y siempre creen estar en lo cierto, porque si no pensaríamos de otra forma, como es lógico. Pero a veces tienes dudas, miedos, inseguridades, sobre todo con respecto a la crianza. Porque soy nueva, o mamá novata como se suele decir, porque todo me pilla sin experiencia previa, porque a veces lo que hago no funciona aunque me funcionaba hace un par de días. Lo que estaba convencida que era lo mejor o la mejor manera de actuar, ahora me parece un gran error. Porque aprendemos cada día de la experiencia adquirida, de otras mamis que nos cuentan sus experiencias, de lecturas de profesionales, de psicólogos, pediatras, artículos,....pero sobre todo aprendemos de nuestros hijos.
Ahora está de moda etiquetar el tipo de crianza que sigues y defenderla a muerte criticando a los demás(bueno esto quizá a ocurrido siempre pero nunca me he fijado porque no me ha interesado la crianza hasta que me he planteado tener hijos). Esto no me gusta nada. por este motivo me cayó mal Carlos Gonzalez cuando leí "Bésame mucho", algunos conceptos e ideas me gustaron mucho pero no sus formas y su modo de decir sin tapujos que él está en posesión de la verdad absoluta y el resto de seres humanos inferiores a él, pobrecitos, están equivocados. Ahora acabo de terminar "Mi niño no me come" que también es suyo y sin embago me ha encantado, porque aborda el tema mucho más directamente sin perderse (tanto) en criticar a los demás para demostrar que tiene razón.
Yo creo que dentro de unos límites por arriba y por abajo (porque todos estamos deacuerdo que no está bien maltratar a un niño ni dejarle hacer absolutamente todo lo que se el ocurra en cada momento, simplemente por su integridad física y emocional), todo lo que hay enmedio es respetable y es bueno para alguna madre en concreto, con uno o varios niños en concreto y con sus circustancias concretas. Incluso como he dicho y me repito, esa misma madre puede ir navegando por las muchas posiblidades según el momento, la edad del niño, la experiencia, las circustancias externas,...etc. Así que me repito también en el "nunca digas nunca" porque no sabemos lo que nos depara el futuro, lo que no tienen preparado nuestros niños que nunca dejan de sorprendernos, ni lo que encontraremos en el camino de información y reflexiones que nos hagan cambiar el enfoque de nuestras ideas.