Ingredientes:
1 tomate
1 pepino
1 zanahoria
lechuga de roble
Queso para ensaladas (si os gustan especialmente puede ser queso de cabra o de feta)
nueces
aliño
Se cortan el queso, el tomate y el pepino en cubitos, la zanahoria se pela y se siguen sacando tiras con el pelador, si quedan muy largas las cortamos a la mitad con la tijera. Troceamos las nueces para que no queden trozos grandes. Aliñamos también como nos guste, yo lo he hecho con el aliño clásico de sal, aceite de oliva virgen extra y vinagre de módena.
Esta ha sido la primera ensalada de los peques. Sus primeras ensaladas están siendo con trocitos pequeños y poca lechuga (que la textura les echa para atrás un poco, pero si es poca y bien troceada se la comen). No os voy a decir que las devoran como hacen con los espagueti o las albóndigas, no, pero bueno las comen bastante bien, mejor de lo que me esperaba antes de probar, aunque quizá coma más el suelo que ellos, jejeje. Hoy hemos cenado ensaladilla rusa, también era la primera vez y a mi gordito le ha encantado. Pero los otros dos han sido un poco más remilgosos, después de 3 ó 4 cucharadas ya no querían más, o escupían lo que tenían en la boca y se comían sólo la patata o la aceituna.
En estas cosas de ir introduciendo comidas nuevas estamos las mamás un poco perdidas porque nadie nos guia. Yo lo que hago es ir probando y si algo no lo quieren lo dejo para volver a probarlo más adelante. Muchas veces me pasa que uno de ellos lo come muy bien y los otros dos no, como hoy, y en esos casos no sé que hacer. Por un lado no pienso hacer una comida para cada uno, y por otro no me hace gracia que uno de ellos se quede sin comer porque he puesto algo que no le gusta. Pero bueno es lo que estoy haciendo ahora. Si no le gusta se toma el yogur o el bibe de postre y ya está, ya le gustará la próxima vez, si Dios quiere.
Hoy he tenido pediatra y ella me dice que no les dé postre ni nada si no comen que los estoy maleducando, bueno me lo decía por la niña que no va bien con su curva...en fin os lo cuento en unos días que tengo con la otra pediatra y os cuento las dos visitas del año y medio, si Dios quiere, porque la otra pediatra es todo lo contrario a esta, siempre me dice que no preocupe por los gráficos si los niños están sanos y van a su ritmo...en fin para volverse locos.